En México, en el estado de Quinta Roo, puedes encontrar la zona arqueológica maya de Dzibanché. Esta se conoce como un asentamiento de la cultura Maya que se construyó aproximadamente en el año 200 a.C. Aunque en sus comienzos solo fue una pequeña aldea agrícola, con el paso del tiempo se convirtió en un interesante despliegue urbano y social que llego al punto de su mejor auge en el periodo clásico. Hoy te mencionamos lo que puedes encontrar en este lugar, caracterizado por sus ruinas arqueológicas y otros elementos de interés turístico.
Un poco de historia de Dzibanché
Desde la construcción de este importante asentamiento de los mayas, no se tenía claridad sobre su significado u origen. No obstante, gracias a los hallazgos de “Dinteles de madera” con inscripciones talladas referentes a los calendarios de antaño, se llegó a la conclusión de que su nombre en la cultura Maya significa “Escritura sobre madera”.
Asimismo, la historia registra que el nombre de este lugar se lo otorgó en 1927 el médico militar y arqueólogo inglés “Thomas Gann”, debido a estos elementos que se encontraban en el Templo del edificio VI que componen el sitio. Cabe destacar que, estos dinteles se retiraron de la zona para poder conservar su estado y originalidad.
Los estudios han podido demostrar que, durante el primer periodo de construcción de esta acrópolis, se creó el conjunto del edificio 1, que se conoce como el “Templo del Búho” y el edificio número 11, también llamado “Templo de los Cormoranes”, por solo mencionar algunos de los que más se destacan hasta la fecha.
Posteriormente, en el periodo clásico mesoamericano, es que se comenzó con la elaboración de otros asentamientos, tal como los edificios públicos, los palacios y las casas de agrupados. De estos, se dice que muy posiblemente tuvieron repercusiones positivas en las actividades económicas del lugar.
Muchos años más tarde, aparentemente ocurrió el abandono progresivo de las ruinas por parte de los habitantes, los cuales se dirigieron espacios más dispersos y ruralizados. En los siglos posteriores, los antiguos habitantes de este lugar solo acudían allí para realizar ofrendas, así como para llevar a cabo sus respectivas ceremonias ancestrales y culturales.
Curiosidades de Dzibanché
Las ruinas arqueológicas de Dzibanché se ubican en una zona de selva baja en el lado norte de la Península de Yucatán. Todo este espacio tiene un alcance de más de 40 kilómetros cuadrados de asentamientos que se construyeron hace una gran cantidad de años.
Es importante destacar que, la arquitectura exhibe fachadas atractivas con pilastras, así como bóvedas de gran tamaño en las que se muestra un doble desarrollo con tensores en los extremos de sus pequeñas galerías.
Asimismo, en el lugar podrás apreciar múltiples grabaciones en jeroglíficos, las cuales hacen creer que Dzibanché hizo parte de las labores de conquista de diversos pueblos.
¿Qué ver durante el recorrido por Dzibanché?
Si decides acercarte a esta zona del Estado de Quintana Roo, durante tu recorrido podrás apreciar un gran número de edificaciones.
Por lo tanto, a continuación, te dejaremos una pequeña descripción de lo que podrás encontrar durante tu viaje a este lugar:
1. Edifico VI o Templo de los Dinteles
Mediante un diseño de talud, este es uno de los edificios que se encuentran un poco aislados. Su construcción exhibe un basamento de cuerpos completamente adornados y tableros muy similares a los que fabricaban en épocas de antaño los “Teotihuacán”. A simple vista, este edifico se mantiene en muy buen estado de conservación, siendo una de sus atracciones más llamativas un dintel en materiales de madera cuya data registra de los años 554 d.n.e.
2. La Plaza Gann
El nombre de este espacio se debe al homenaje que se le realizó al primer visitante académico que llegó a este lugar. Allí podrás apreciar diversos edificios que cumplían variadas funciones y que se erigieron en épocas distintas.
La edificación más representativa que bien vale la pena destacar es el “Edificio II”, también que también se conoce como el “Templo de los Cormoranes”. Ya que, posee una planta cuadrangular en donde se sitúa un templo de dimensiones excepcionales.
3. Estructuras 10, 11, 12 y 14
Estas estructuras fueron las que en la antigüedad se utilizaron como áreas residenciales, elaborándose aproximadamente durante el periodo clásico tardío. Estando allí puedes aprovechar para darle un vistazo al “Edificio XIII” o “Templo de los Cautivos”, así como a la “Plaza Xibalbá”, que se utilizó como centro principal de la localidad en sus mejores tiempos de auge.
4. Otras edificaciones de la acrópolis
Cuando termines de visitar las construcciones que se mencionaron antes, puedes dirigirte hacia el segundo conjunto de edificaciones que se conoce como “Kinichná”. Es importante mencionar que, estos espacios recibieron dicha nomenclatura gracias a algunos elementos en materiales de estuco que fueron encontrados en el sitio, haciendo representación al “Gligo Kin”, que aún se puede apreciar en el área posterior de este conjunto.
Además, esta parte de la acrópolis hace juego importante con unos edificios bajos que se sitúan alrededor de la plaza. Según los expertos, apuntan a que estos últimos espacios se utilizaron como plataformas para templos de menor tamaño, así como espacios habitacionales.
¿Cómo llegar a Dzibanché?
Para que puedas acceder con facilidad al complejo arqueológico de Dzibanché, es necesario que busques la Carretera Federal 186, la cual conduce hacia Chetumal– Escárcega. Cuando llegues al kilómetro 215.5 (que se dirige hacia un camino asfaltado hacia los habitantes de Morocoy y San Pedro Peralta), deberás buscar el área que se conoce como “La Pista”.
Cuando estés en este sitio, debes situar la desviación que te llevará hasta la zona arqueológica. Luego, a unos 7 kilómetros al este, verás otro camino de asfalto que llegará de forma directa hasta estas ruinas.
Cabe destacar que el lugar se encuentra disponible para todo el público de lunes a domingo desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde. No obstante, en ocasiones realizan excepciones para que el último ingreso de las personas sea a las 4:30 de la tarde.
Finalmente, cuando estés allí, solo deberás pagar el valor de la entrada que te lo indicarán, y disponerte a disfrutar de todos los encantos que te ofrece este lugar.
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